Acerca de mi

Soy un vasco, montañero (sin txapela todavía), ex-jugador de rugby,  con alma geóloga. Mi vocación por los minerales viene desde que era un niño, ya que me llamaban mucho la atención las muestras de cuarzo que recogían mis abuelos en sus paseos por Pirineos. Siempre que iba a Pirineos, dedicaba un rato a limpiar y recolocar las muestras para que resaltasen en la balda donde estaban "tiradas". En uno de esos viajes a Candanchú, paseando por Jaca encontramos un mercadillo medieval donde vendían minerales y pude empezar la colección con los minerales más llamativos: un azufre masivo y un pedazo de silvinita roja.

Pasado el tiempo, y a punto de terminar el bachillerato se presentó esa duda de qué estudiar en la universidad: Ingeniería de Minas no me convencía, Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos menos aun, lo que más me atraía era Geología pero mi madre, sabia ella, me instaba a hacer una ingeniería que sería mejor para mi futuro. Hasta que revisando por Universia ella encontró la carrera de Ingeniería Geológica y ahí que me metí, en Madrid, en la Escuela de Minas, estudiando aquel invento que titularon Ingeniería Geológica.

El 3º de carrera fue un año muy especial para mí: me dieron una beca de colaboración en el Museo y a finales del curso tuve la oportunidad de hacer las prácticas en empresa en Perú, para la empresa Cía. de Minas Buenaventura S.A.A. Aquella experiencia me marcó y me ayudó a saber qué quería hacer una vez terminada la carrera: geología de yacimientos. Aquel viaje también me supuso cumplir un sueño de la infancia, ya que los minerales que compraba venían de Madagascar o de Perú, y quería poder ir a esos sitios a ver y buscar los minerales por mi mismo. En 4º de carrera regresé a Perú, a otra mina de Buenaventura (Recuperada), donde disfruté como un enano viendo geodas con cristales de blenda de hasta tamaño puño.  Para seguir con los recursos minerales, visto que 5º estaba muy centrado en geotecnia y mecánica de rocas, crucé el charco nuevamente para estudiar en Chile durante un año.

Una vez terminada la carrera hice un Máster en Recursos Minerales y empecé a trabajar en Madrid. Duré 9 meses, hasta que me salió la oportunidad de currar en un clásico peruano como Pasto Bueno, donde no me lo pensé y volví a hacer las maletas.

Cerrado el proyecto en Pasto Bueno, volví a Madrid y aproveché a estudiar Ingeniería de Minas (quién me lo iba a decir!!! jaja), hasta septiembre de 2013, que he vuelto a hacer las maletas para venirme a Perú a buscar curro.